Lovnis, un espacio retro y muy marciano que recupera el plato combinado
Ovni y Love se funden para dar vida a Lovnis, el nuevo espacio madrileño de Álvaro Castellanos e Iván Morales, fundadores de Taberna Arzábal, que rinde homenaje a aquellas cafeterías de toda la vida en la que se servían rotundos platos combinados. Con una estética que mezcla lo retro con lo extraterrestre, propone una experiencia gastronómica original y divertida que evocará aquellos maravillosos años de tu infancia.
El amplísimo local del barrio de Salamanca está distribuido en dos plantas, cediendo la primera al espacio de barra -que en los locales de sello Arzábal acaba convirtiéndose en un lugar imprescindible-, y a una luminosa zona de mesas altas. La planta inferior ofrece deliciosos contrastes, con aires industriales, ladrillo visto de sus paredes o la cálida tarima del suelo, frente a la minimalista barra blanca adornada con elementos muy futuristas, y mobiliario vintage. De igual forma, la vajilla empleada tiene su particular choque de estilos, entre aquellas bandejas compartimentadas que recuerdan a los comedores de colegio, o los viejos platos Duralex y copas de metal que tenían nuestras abuelas, que conviven con innovadores objetos como probetas.
Su carta es una oda a la gastronomía más castiza e informal, y está compuesta básicamente por Platillos -las raciones de siempre-, y los platos combinados. En los primeros, obligatoria su ensaladilla o los champiñones rellenos, que acompañan a otros clásicos como los mejillones tigre, las alitas fritas, las rabas o las gambas al ajillo. En cuanto a los platos combinados, su propuesta estrella, se replican algunos de los clásicos, como el Número 1, a base de Huevos fritos, pimientos y patatas, aunque la mayoría presentan aportaciones propias, como el Pollo picantón asado a la rotí con verduritas a la plancha y salsa romesco. Completan la carta un arroz, pasta, carne y pescado, a los que acompañar con otros sides, de manera que cada comensal pueda personalizar su propio combinado como quiera. Arroz tailandés, ensaladilla, bastones de calabacín o salmorejo son algunos ejemplos de este tipo de acompañamientos.
Como maridaje, la oferta de vinos se agrupa en torno a vinos jóvenes y divertidos, que comparten protagonismo con la cerveza. Y al llegar a los postres no podrás evitar cierta ilusión al reencontrarte con míticos de nuestra generación como el Pijama, con bengala y sombrillita incluida, el limón helado o la tarta Comtessa. Con horario non stop de lunes a domingo entre las 8:30 y las 2:00, ofrece desde desayunos combinados que incluyen zumo natural, bollería francesa o plancha, hasta un ambiente animado después de la cena, con DJ y sofisticada coctelería.
